Directores

Directores:

Roy Davatoc

Walter E. Cordova Romero




Páginas

jueves, 8 de julio de 2010

Mayo – 2010 ************** Lima – Perú *************** Número – 4

Susy Morales Coz - Huancayo, Perú

Estoy aquí

Estoy aquí
sola
con mi amiga fiel: Mi almohada
la melodía despierta
un recuerdo
En el alma
la letra desencadena
los latidos
que cobija
tu mirada. Del poemario: Secreto de la Isla

Susy Morales Coz - Huancayo, Perú

La Noche

La noche vuelve a retornar
aproximándose a la luna que se deleita
viendo encuentros súbitos
cuando cercanos latidos se aceleran

Vista arrobada brilla, saltan
do
Corriendo sus pupilas con alegría
se saludan en silencio parpadeando

La noche envuelve al mundo en sabor de luna
mientras enmudecida promete volver
y en su retorno contemplar cada momento
cuando vino brinden
juntos dos opuestos

Luna

Prefiero la noche
por que siento
sobre el mundo
a la luna alta
una esfera observa claridad
y suspiran los parpados
entreabiertos.

Ciega

Sucumbe
mi soledad
en tu sombra
pero no se marcha
a pesar del tiempo.

Tiempo agigantado
desde que te vi pasar
posando tu miel
en otra flor
pero no lo creo
estoy ciega
y así me quedaré
ciega
sólo con tus pasos
en mi vació
Del poemario: Secreto de la isla

Luis Alberto Salvarezza - C. del Uruguay, Argentina

Los Cuadros

Me gusta mirarlos cuando ellos se niegan a que los mire, cuando no me prestan sus ojos y adónicos, soberbios y en un griego apenas perceptible me piden que me aleje. La libertad está en ellos o en mi mirada que se esfuerza por encontrarla. Se desparraman por las paredes como frutos, bandadas o topacios. Aunque inexplicablemente posean mucho más de las flores que carozos, alas o durísimas transparencias… Por eso se pueden ver como un amontonado jardín… Mirándolos sé que pierdo pie y caigo en otra poesía. Un murmullo de pesados azules, lilas, rosas…, en crecida me cae como otro cielo, encima. Me arrastra. Me ahoga. De ellos vemos su latido pero nacieron del pensamiento. Mienten –dicen del arte -, pero para que sepamos la verdad. Y ella permanece gritándonos el encanto de ser toda la sangre en su latido. Me permiten viajar con otros equipajes, esconderme donde nadie me ve, saberme desde el instinto o caer, insisto, en un otro poema o confesión. A veces la tristeza es por ellos tanto como por mí. A veces me despierto sobresaltado por el galope de entintados alazanes, el roce angélico de algo alado o un viento que transporta paraguas, la huella de un zarpazo o la caricia de una mujer hermosa. Aunque utilicemos diferentes lenguajes, siempre estamos diciendo lo mismo, nos repetimos. A estos cuadros míos la noche les pertenece. También la primera palada que los entierra en el olvido aunque algo del cielo les llega desde atrás y los humedece. Hay que verlos como si fuesen una parte nuestra por eso los veo como si fueran cuerpos, algo encendido. Todos sostienen con un brazo una firma, cotizaciones, y con el otro, un jazmín, una pasión insatisfecha, un corazón aplastado. Desde qué adentro nos inventan este afuera, tanta intemperie. El arte es un juego que sólo nos permite saber despertar, aunque adormezca. Los he visto balancearse como astros, girar como trompos o relojes, tener algo de los termómetros y la locura; los he visto caer y romperse de la misma manera de caer y de romperse que tienen los hombres, a pedazos.

Por eso ir de cuadro en cuadro es como ir de tumba en tumba, adivinando muertes.

Sinthia L. Calle Ramos - Satipo, Perú

A bordo al peso de la cama,
me chupo al hueso
y me depuro entre la libido.
Con igual gana
despojo y desvisto mi vivacidad
mas resisto y tiemblo,
me enliquido titillando,
asida como un feto;
y ya en la boca me restrego la patética escena,
encrespo mi buen juicio, lo continúo a río

Voy
le sigo a la libertad del mundo
pero le soy torpe, la corrompo
surco
despotrico
y avanzo
tengo apuro,
no me contengo
en cauce.

Quiero abrir las piernas y los brazos,
dislocarme el sexo a codo,
arrasarlo todo;
entre piedras y tormentas;
por los muslos revestidos
de la hiedra hedera;
yo desfiguro mi raudal
le desbarato a añicos a sisear
bisbiseando sin pecado en suma
Sin la_mia
Sin la_mia
con la S de mi nombre
hasta término de torrente.

Y me distiendo sobre la pradera;
a puro aire,
con la gota en frente
a puro mar
sin la forma aquieta
Y soy YO
Por fin
y de cara descubro:
que mi hueso, sabe a carne.

Sergio Aguilar Rodríguez - Chincha, Perú

Puede que sea un hombre
demasiado soñador
y quizá no exista nadie como yo

Y hasta es posible, cariño mío
que este amor nunca llegue a concretarse,
ni en mil noches ni en mil días,
y de pronto me llegues a olvidar
como los niños que olvidan los sueños en el camino,
y con el tiempo,
que llega despacio como las aves del campo,
volvamos a encontrarnos...

Y quizá en tu vida
yo vuelva aparecer como la noche herida
o como el alba de cada madrugada
pero también cabe la posibilidad
de que aquello nunca suceda...

Y aunque mis palabras
sean duras, no son mas
que el reflejo de aquella mala idea
de no querer equivocarme...

De no querer saber
lo que pasará con este sentimiento,
de no querer ver el reflejo de alguien triste
y que cada día se reproche el saber que de tu partida...

Pero yo viviré para recordar
todos los momentos que vegetamos juntos
como este amor que me está consumiendo,
como este amor que me está haciendo preso de ti,
viviré para demostrarte
que aún se puede hacer más...

Y estaré ahí invisible,
llegando en cada noche
en la brisa, tocando tu rostro
como tu luz y mi sombra
como cada respiro tuyo
y hasta cuando pienses que me has olvidado
aún seguiré ahí, hasta en la ausencia ingrávida de tus ojos.

Anahí Vásquez de Velasco - Lima, Perú

Ser Gusano

¿Cómo es posible que el ser humano
sea tan cruel, tan dañino y bajo?
Cual vulgar gusano venenoso
se arrastra sobre la tierra,
que es lo único bueno que conoce;
se arrastra entre los demás
y los envenena solo con un vistazo.

¿Cómo es posible que la tierra
esté poblada por nosotros
y que por contradicción vivamos
con la idea de que es una misión
reproducirnos?

¿Cómo es posible que el ser humano
sea más y en verdad
sierpe o lombriz
que ente bendito
por el amor y la razón?

¿Cómo es real que lo único
que poseamos
sea nuestra existencia letal?

¿Cómo es posible
que existamos
si nos matamos
tan solo con mirarnos?

¿Cómo es posible,
que suponiendo que tuviéramos alma,
esta solamente contenga veneno
y que con ese, además de matar lento,
lubriquemos el camino
para el siguiente perverso asesinato?
Si hasta los gusanos verdaderosson más santos que los hombres.

Gerardo Ferreira - Montevideo, Uruguay

Fósil

I


durante años sentada en el mismo lugar
durante años detenida en la memoria de la arena
granito de luz, hilacha
qué hay más allá de vos además de un río

II

ojalá yo tuviese un río
un río verde agua, un río verde río para correr
por los brazos peludos de las dunas tristes
ojalá hubiese un río en mí
así de chiquito, fósil
para llevarse los años como rocas que giran
como rocas verdes que llevan el tiempo al mar y giran
como un río.

la luz / la sombra

la luz y la palabra luz bajo la sombra la sombra austera que no escribe a la luzo la luna / una palabra con penumbra
que inventa su propia luzla sombra y la palabra sombrala palabra luz que educa a la sombra / la sombra rebelde y distraída la anárquica sombra que esquiva a la luz queda en pose cuando no hay objetosigue especulando cabizbaja en su formapluma cayendo de síreposa sobre una pila de libroslibros que discuten alfabetos frente a la luzfrente a la palabra luz
la sombra traicionera se clava en un bolsillo
como una moneda, piensa la palabra sombra:no todo lo que brilla es luz.

Zoelia Frómeta Machado - Bayamo, Cuba

Zoelia Frómeta Machado (Bayamo, Cuba) Poeta y narradora. Licenciada en Literatura y español, realizó además estudios de Bibliotecología y Periodismo. Se desempeñó como académica en la Universidad Veracruzana, Ver., México. Miembro de la Sociedad Internacional de escritores (SIE). Galardonada con diversos premios de poesía en su país y el extranjero: Premio del Concurso Territorial “Santiago de Literatura” (1993). Premio Concurso Nacional “Primero Sueño” Homenaje a Sor Juana Inés de la Cruz”, Revista “Vivarium“. Ciudad de la Habana, (1995). Premio del Concurso “Fidelia”, UNEAC, (1996). Segundo accésit Concurso de la Revista “Palabras Diversas”. España, (2007). Tiene publicado los libros: Pasos de ciego (1995), Ave de tránsito (1997, Pasión de los delfines (1999), El fervor de las bestias (EU, 2007), Auto de fe (España, 2009). Poemas y colaboraciones suyas han aparecido en antologías y revistas: Chile, Argentina, Venezuela, Brasil, España, Colombia, Estados Unidos, Cuba, Perú, México, Francia. Actualmente reside en México.

Soledades

Este día comienza la soledad.
Este día largo en su bostezo de aire indetenible.
La soledad comienza por lamer mis talones.
Desordenar mi apariencia modosa
y a veces cursi de mujercita, no del siglo 21
sin posmodernidades, poses o diatribas
que nada tienen que ver con la existencia de este día
que la soledad es una taza de café y una avenida
estrecha sin ruidos y una conversación
de ¿has pensado suicidarte cuando te abandone?
Muchos lo hacen. ¿Será cobardía o…?
¿Y ella qué dice?
Y un último sorbo de té y otro gesto
sin importancia. Esta conversación
que no lleva a ninguna parte y los dos los sabemos.
Y otra taza de silencio y un roce de ojos
con la complicidad de quien lo sabe todo.

Entonces como irse lento, en un sueño
de aguas, la soledad de este día se sujeta
a la costumbre, a mis porfía de estoy
y soy el gato sobre el travesaño mirando
viejas sombras escurrirse sobre las casas en calma.
Pienso que nunca he amado más la soledad
que en este segundo que es y no es y meditar
la luz puede ser …

Zoelia Frómeta Machado - Bayamo, Cuba

Poema de amor dudoso
Para Roberto

Todo el día he pensado en ti.
Hace frío afuera y en mis manos
que ahora te piensan y escriben confusas este poema.
Entonces descubro el jadear
del silencio entre mis dedos
entre los resquicios de un deseo
asustado en mi cabeza.

Éste me digo, será un poema tranquilo
nada de insensateces, sin augurios
con olor a oficina a terquedad.
De esos poemas que no dicen nosotros
ni tú, ni yo, ni te amo, pero hablan
de una mujer y hombre que se miran
se tienen, se desean. Y sabe a canícula
a fugas, a manos resbalando codiciosas
por mi espalda y tus piernas a horcajadas
sueñan y amanecen palpitantes.
Tus piernas y la mañana que se alarga
en tu respiración hecha de palabras prohibidas
aromas clandestinos, ternuras.

Poema que no tiene un después
sí un nombre, susurros, ansiedades
asombro, nunca una promesa.
Y yo digo, amor mío y confieso el misterio del gozo
que es la liturgia de saborear tu voz
con la yema de mi labio y ser ardiente mar
ola sedienta, libre, sin control, ni destino
bramando sobre tu cuerpo.

Hiada (Vanesa González P) - Galicia, España

"Cuando se hundieron las formas puras
bajo el cri cri de las margaritas,
comprendí que me habían asesinado.
Recorrieron los cafés y los cementerios y las iglesias,
abrieron los toneles y los armarios,
destrozaron tres esqueletos para arrancar sus dientes de oro.
Ya no me encontraron.
¿No me encontraron?
No. No me encontraron”
( Federico García Lorca.)

Formas Puras

Y cuando las formas puras exaltaron
los campos armados del ser que más profundo
habita en mi cuerpo defectuoso y profano,
había construido en mi mundo
la perfección inhabilitada de un ser irracional,
en campos vallados con espinas de púas
metálicas, punzantes y clavadas en los pies
de unos cuantos luchadores que aún viven
de esperanzas y de metas sin verdades.

Se apagó el cri cri lejano como una puesta de sol,
tranquila... momentánea, que rasguea aún unos cuantos
rayos, pero se apaga, lentamente... mis ojos
devoran la hermosura hecha vida,
la puesta más miedosa,
y a la vez pasiva
la más hermosa,
y a la vez cercana... se apaga..
...lentamente... se apaga.

Hiada (Vanesa González P) - Galicia, España

Traducción al gallego.


“Cando se fundiron as formas puras
Baixo o CRI CRI das margaritas,
Entendín que me habían asasinado.
Recorreron os cafés e os cementerios e as iglesias,
Abriron os toneis e os armarios,
Destrozaron tres esqueletos para arrincar seus dentes de ouro.
Xa non me atoparon.
¿non me atoparon?
Non, non me atoparon”
(Federico García Lorca)

Formas Puras

E cando as formas puras exaltaron
Os campos armados do ser que máis profundo.
Habita no meu corpo defectuoso e profano,
Habìa construido no meu mundo
A perfección inhabilitada de un ser irracional,
en campos vallados con espinas de puas
Metálicas, punzantes e clavadas nos pès
Duns cantos loitadores que índa viven
De esperanzas e de metas sen verdades.

Apagouse o CRI CRI de lexos, como unha posta de sol,
Tranquila… momentánea, que rasguea inda uns cantos
Raios, pero apagase, lentamente… meus ollos
Devoran a fermosura feita vida,
A posta máis medosa,
E a vez pasiva,
A máis fermosa,
E a vez cercana…apagase
…lentamente… apagase.

Juan Benavente - Lima, Perú

Guerra

Guerra es el paladín de la destrucción
la eliminación del hombre por el hombre
feroz odio que aplasta al amor
fuerza que doblega a la razón.

Guerra es la agresión de la oscuridad
también del hueso y carne sin sesos
nos obliga a nadar en el pantano
a lidiarnos entre sanguijuelas y alimañas.

Guerra es la cortina de humo de la cobardía,
demencia e intolerancia de los poderosos
quienes indiferentes ultiman deseos y
ven caer a tus hijos como hojas de otoño.

Guerra, festín de los traficantes de armas
extraña felicidad de los mercenarios
que brindan con la sangre entre los dedos
los sucios millones ocultos en Suiza.

Guerra...
guerra es la paz en el campo de concentración
la inocencia bajo el yugo de la barbarie
la exclusiva estupidez de confundir el Poder
con el barato canje de hijos por petróleo
obsesión preñada de insaciable sed de fuego
suscriben sendas campañas de ilusiones
y azuzan, valiéndose de la virginidad mental
irrumpen fervientes ante el estigma: Heroicidad
acaso, suelo y sueño que jamás pisarán
porque así demanda el ángulo letal de la pesadilla
perdido en el laberinto de la miseria sin respuestas
las ideas calcinadas por el gigantesco hongo
símbolo de la herencia civilizada en agonía;
sólo la desconfianza soportó desde mucho antes
como púas que adornan las fronteras de la Libertad.

Guerra es la antesala del adiós a la Tierra
y en estos tiempos del último milenio
sólo las cenizas y la nebulosa cantarán victoria
bajo la sentencia de muerte de los tímpanos
de hombres que sólo aprendieron a matarse mejor.

Merarí Salazar Campos - Huánuco, Perú

Al agua

Desesperada ruge la sedienta tierra;
sin agua, es peor que una guerra,
no habría vida, sería un desierto,
este planeta un globo muerto.

Preciado líquido vital,
si no estás la cosa es fatal,
muere el hombre y el animal
un verdadero exterminio total.

Eres vida de semovientes y plantas,
con tu ausencia la existencia quebrantas,
oh rica agüita, pura y transparente,
contigo está muy feliz todo ser viviente.

¡Prevalezca la razón, ya no más contaminación!
ya no más ríos con basura ¡Eso es una locura!
seriamente cuidemos este vital elemento,
antes que todo sea un terrible lamento.

La bestialidad del hombre, desaparece al manantial;
es cosa terrible el calentamiento global;
ya es un caos el mundo sideral,
todo esto nos conduce al funeral.

Oh colegial, aprende proteger al ocunal,
oh profesor, enseña que el agua es lo mejor,
señor profesional, defiende el líquido vital,
todos debemos limpiar, antes de ensuciar,
y así no tendremos de qué lamentar.

Del libro inédito “Amanecer poético del maestro”